Hola a todos, espero hayan tenido un excelente fin de semana haciendo algo divertido como ir a alguna función del ciclo “Misterio, Magia, Miyazaki” o visto como se arruina una infancia por Michael Bay viendo la nueva cinta de Las Tortugas Ninjas. En este miércoles de Japón en Asia~Stage les tenemos lo mejor de la cultura del país del sol naciente, y el tema de hoy es una tradición bastante reciente en esta cultura milenaria teniendo menos de 100 años de que se dieron las primeras muestras de este arte.
De seguro más de uno de nosotros tenemos entre nuestros recuerdos de la infancia el teatro guiñol, en donde con títeres de guante o marionetas de hilos nos contaban historias divertidas donde personajes fantásticos interactuaban y pasaban por amores y desamores, el kamishibai (紙芝居 drama de papel) es muy parecido a esta antigua forma de entretenimiento nacida en Europa.
El kamishibai consta de una caja de manera de al rededor unos 45x40x20 cm, en donde se introducen varias laminas con ilustraciones al anverso y con el texto que se narrará al inverso, tiene 3 puertas enfrente que sirven como telón para comenzar y terminar la función, y en algunos casos un haza de cuero para que el kamishibaiya (narrador de kamishibai) lo pueda llevar de un pueblo a otro. Se anuncia la función con el hyoshigi, dos tablillas de madera unidas por una cuerda que el kamishibaiya golpea para que todos los niños de la aldea se acerquen a la función, al final de esta recibe algunas propinas por parte de los niños y uno que otro adulto .
El kamishibai se utiliza principalmente para narrar historias con una moraleja a niños de entre 6 a 12 años de una manera simple y entretenida como los fabulas occidentales que nos cuentan desde pequeños, más eso no quiere decir que sea un arte limitado a un publico infantil, siendo disfrutado también por adultos de todo el mundo.
En México vive desde su infancia la muralista japonesa Eiko Matsui, quien ha tenido una estrecha relación con el kamishibai debido a que su madre, Noriko Matsui, fue una kamishibaiya que incluso escribió un manual sobre como realizarse el performance de un buen kamishibai, el cual ha sido traducido del japonés al inglés y posteriormente al español, para los interesados, una copia que puede consultar todo el mundo se encuentra en el centro de información del Museo Interactivo de Economía. Eriko a parte de transmitir el arte enseñado por su madre, también ha sido la autora de un cuento llamado Nidoto (二度と nunca más), en donde narra la experiencia de Hiroshima y Nagasaki tras los bombardeos atómicos desde el punto de vista de los edificios, plantas, niños y la voz de los sobreviviente de aquel terrible día.
Tal vez algunos se estén preguntando porque el manual sobre como se usa el kamishibai se encuentra en la biblioteca del Museo Interactivo de Economía (MIDE); la respuesta a esta interrogante viene del año 2010, cuando el MIDE tuvo una exposición temporal llamada “Hola Querido Enemigo” donde se presentó una biblioteca infantil con títulos de todo el mundo y actividades con referencias a estos títulos siendo el tema principal la paz y la guerra. El MIDE utilizó el kamishibai en ese momento para narrar historias sobre las consecuencias de la guerra, el racismo y la intolerancia; y con este fin le pidió a la maestra Sae Hoshino que les mostrara como realizar el arte. Fue tal el éxito de la actividad entre niños y adultos, que en el año 2013 fue retomado para la exposición “Pequeños Consumidores”, ahora para enseñar sobre la importancia de estar bien informado antes de consumir. Esperemos veamos más del kamishibai en el MIDE en el futuro.
Como pueden ver, el kamishibai es una herramienta muy útil a la hora de enseñar lecciones básicas a los niños como el respeto entre ellos y a sus mayores, el ser honestos y buscar más allá de lo obvio, recomendable para maestros de nivel primaria; aunque claro también puede divertir y hacer pensar al adulto que mantenga la mente abierta.
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