Hola a todos, esperamos hayan tenido un excelente fin de semana. Hoy les queremos platicar un poco de la jornada de 16 días que comenzó a mediados del mes pasado y terminó el domingo pasado en la plancha del zócalo en el centro histórico de la CDMX.
Todo comenzó el 21 de mayo, ese día asistimos a la inauguración de la Feria de las Culturas Amigas, evento que reunió en esta su 8va edición a 94 representaciones diplomáticas de todos los continentes, y claro que uno de los países invitados fue nuestro querido Japón. Este año uno de los detalles más llamativos fue el diseño arquitectónico ganador del concurso que convocó el gobierno de la CDMX para albergar los locales de venta de productos de cada representación, el cual fue un enorme círculo, el cual en palabras de su diseñador es un símbolo de igualdad entre las naciones, ya que en un círculo no existen las jerarquías.
"Este domingo concluyó la #FCA2016, gracias a ustedes esta edición rompió récord de asistencia. Vía webcamsdemexico". Publicado por Miguel Ángel Mancera en Lunes, 6 de junio de 2016
Ese día tuvimos la oportunidad de hablar un poco con el excelentísimo embajador Akira Yamada, y nos compartió un poco de su entusiasmo sobre que los mexicanos puedan acercarse al a cultura japonesa a través de este tipo de eventos.
El stand de Japón no difirió a lo que pudimos el año pasado, se encontraba divido en 2 secciones, uno que sería la parte de grupo Mikasa con la venta de dulces, botanas y licores japoneses, y la otra de Tiara-chan, donde se podía conseguir peluches, tazas y otros juguetes de los personajes de la simpática muñequita japonesa.
Así mismo, ese día se hizo la presentación de 3 libros sobre la cultura japonesa en las instalaciones del Antiguo Colegio de San Idelfonso, una de las 4 sedes alternas que tuvo esta feria en esta edición. Los libros presentados fueron “La gallina azul“, novela que cuenta la historia real de una familia japonesa y sus dificultades de vivir en México durante la Segunda Guerra Mundial, “Los que vinieron de Nagano“, investigación sobre una de las migraciones japonesas más numerosas que vivió México, y “Agend’ars“, libro de poesías japonesas contemporáneas.
Posteriormente nos saltamos hasta el domingo 29 de mayo, cuando hubo la primera presentación de la delegación japonesa en el escenario principal de la feria a mano de nuestros amigos de Ryukyukoku Matsuri Daiko, grupo mexicano de taiko okinawense, que con gran animo y energía invitan a todos a bailar al ritmo de canciones tradicionales de matsuri, los cuales fueron acompañados por nuestra queridísima amiga Lupita-chan, el yuru-kyara mexicano-japonés que promueve el cuidado de los canales de Xochimilco.
Y ese mismo día igualmente pudimos disfrutar de la actuación del ballet tradicional japonés en el Museo Nacional de las Culturas por parte de la escuela Ginrei-kai, escuela que cumplió hace poco sus 45 años de historia enseñando el arte de la danza japonesa en México a niños y adultos mexicanos y japoneses.
Por último, el sábado 4 de junio pudimos ver la presentación de Saburo Iida, músico japonés radicado en México desde hace más de una década que con instrumentos modernos como la guitarra eléctrica y sintetizadores crea su música basado en la tradición japonesa de la admiración por la naturaleza, igualmente acompañado por nuestra amiga Lupita-chan.
Como pueden ver, nos divertimos mucho con la oferta de espectáculos que tuvo la delegación japonesa en esta jornada, pero al final nos quedábamos con la pregunta de ¿y qué más? La Feria de las Culturas Amigas pasa por un momento de quiebre por lo que vemos, en donde su oferta e infraestructura ha sido rebasada por los asistentes por mucho, desde el año pasa habíamos visto eso, que las conglomeraciones humanas dificultaban mucho el poder ver los locales, los cuales son el mayor atractivo para muchas personas que van al evento.
Debido a la separación de los eventos japoneses este año, nosotros decidimos hacer esta reseña hasta que terminara el evento, y en ese tiempo pudimos ver diferentes artículos en varias páginas web, siento todas en un sentido negativo hacia la organización y estructura del evento, aunque lo más curioso es que todas las quejas apuntaban al gran número de asistentes del evento, seguidas por la ubicación del evento (curiosamente sugiriendo que la regresaran a Paseo de la Reforma, donde hay menos espacio), y por los precios de los productos los cuales se encontraban más elevados a como se podrían encontrar en otros lugares.
Creemos que el evento en sí tiene las mejores intenciones del mundo, y se puede pasar un muy buen rato en él, pero se tiene que hacer una reestructuración en todos los sentidos, sobre los espacios para el área comercial, la oferta cultural-académica y la accesibilidad del evento para la población en general. Ya veremos si así se realiza el próximo año, o nos encontraremos con los mismos problemas y quejas, y con el facebook del evento presumiendo que se rompió el récord de asistencia nuevamente.
Y cuéntanos, ¿fuiste a la feria? ¿cómo te la pasaste? ¿qué viste?
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