A propósito de días y fechas… Este 15 de Diciembre (en teoría) se festejó el Día Internacional del Otaku; hasta la fecha y hasta que alguien me diga lo contrario, esta celebración no existe, ya que, no hay un fundamento o una organización que la haya catalogado, siendo más una especie de fecha puesta por el mismo aficionado o los mismos medios de información en la red. Dicho esto, me lleva al tema de hoy y el cual va con otra “controversia”. ¿Sabes lo que es un otaku? ¿De dónde surgió esta palabra? Bien, es momento de quitarnos esas dudas y entender que “Otaku” va a más allá de un simple término para referirse a un “aficionado al anime”.
Otaku proviene de un término japonés para la casa de otra persona o familia (otaku). A menudo esta palabra es usada metafóricamente como un pronombre de segunda persona honorífico y su traducción literal es “usted”; esto se puede ver ejemplificado en el anime “Macross”, en donde Lynn Minmay utiliza el término en este sentido y se cree que, a partir de este momento, el término fue usado para catalogar en occidente a los aficionados a la animación japonesa. Pero hay más detrás de eso… El término Otaku, se emplea popularmente en Japón como sinónimo de persona con aficiones obsesivas y se aplica a cualquier tema o campo, aunque sobre todo al fandom de anime y manga. El uso contemporáneo de este término se originó en un ensayo de 1983 por
Akio Nakamori en la Revista Manga Burikko; es por eso que en tierras niponas la palabra tiene una connotación peyorativa, de la misma manera que en occidente se emplean adjetivos como “friki” (el más usado en estos días) o “nerd”; en nuestros días, se han puesto otros términos como “AkibaKei”, “Anime Fan” o “Geek”. Su negatividad deriva de la visión estereotipada de los otakus y de los reportes de los medios de comunicación sobre
Tsutomu Miyazaki en 1989, conocido como “el Asesino Otaku”. Fuera de Japón y en nuestro país, se usa especialmente para los aficionados a cierto tipo de cultura popular japonesa, en especial al anime, manga o cosplay.
La forma coloquial moderna, que se distingue de la anteriormente mencionada por escribirse solamente en hiragana o katakana o raramente en rōmaji, apareció por primera vez en un discurso público de los años 1980, en la obra del humorista y ensayista
Akio Nakamori. En su serie “Una Investigación de ‘Otaku'” (“Otaku” no Kenkyū), impreso en la revista lolicon Manga Burikko, utilizó el término para los fanáticos desagradables de las caricaturas. Animadores como
Haruhiko Mikimoto y
Shōji Kawamori habían utilizado el término entre ellos como un pronombre de segunda persona honorífica desde finales de 1970. Supuestamente un grupo de fanáticos siguió utilizando el término más allá de sus relaciones en donde otros se pasaron a un estilo menos formal de dirigirse al otro. Debido a que este mal uso de la palabra otaku indicó una torpeza social,
Nakamori eligió la palabra misma para etiquetar a los fans.
Morikawa Kaichiro identificó esto como el origen del uso contemporáneo del término, pero señaló que Fan Rodo (Fan Road) contenía los mismos atributos otaku bajo “clubes de cultura”, que fue publicado en 1981. Como lo mencioné antes, otaku a menudo es usado como equivalente a “geek” o “nerd”, sin embargo, puede referirse a un fanático de cualquier tema en particular, afición o cualquier forma de entretenimiento. Por ejemplo, Reki-jo se trata de mujeres otaku que están interesadas en la historia japonesa. Mientras la palabra es usada en el exterior de Japón como sinónimo de aficionado al anime y manga que disfruta de la cultura del anime, en Japón, la palabra puede ser menospreciada como un término para una persona con un interés obsesivo (no necesariamente sobre anime y manga) en particular, algunos casos llegando a niveles extremos como, por ejemplo un hombre enamorado de un dakimakura (una almohada larga japonesa con ilustraciones de personajes femeninos estilo bishojo). Otra reivindicación sobre el origen del término proviene de las obras de ciencia ficción de la autora
Motoko Arai.
Peter Carey en su libro “Wrong about Japan” entrevistó a la novelista, artista y cronista
Gundam Yuka Minakawa, en la que revela que
Arai utilizó la palabra en sus novelas como un pronombre de segunda persona, y los lectores habían adoptado el término por ellos mismos. En 1989, el caso de
Tsutomu Miyazaki “El Asesino Otaku”, llevó al fandom, muy negativamente, a la atención nacional. Posteriormente en 1989,
Tomohiro Machiyama escribió un libro titulado “Otaku no Hon” (lit. El libro de otaku), que se adentró en la subcultura del otaku, y también el académico
Rudyard Pésimo reinvindicó haber popularizado el término.
-La Cita
“La mayor parte de la cultura moderna es superficial y falsa, pende de un hilo, y no es algo que se haya de tomar en broma. Expreso mi interés hacia una época venidera apocalíptica en la que ‘verdes hierbas silvestres’ tomarán el relevo. El período Showa fue triste porque la naturaleza, las montañas y los ríos, todo ello estaba siendo destruido en nombre del progreso económico. Sin embargo no aprendemos nada de lo acontecido en el pasado. No obstante los adultos (piensen lo que puedan pensar y crean en lo que crean) no deberían imponer su visión del mundo en los niños”… Siempre es bueno leer las frases del maestro
Hayao Miyazaki, del cual se ha confundido a veces sus citas referentes a “Otakus”, basándose en la parte coloquial de su país y no precisamente en la parte de occidente.
-La Pregunta ¿Cuándo se “celebra” el Día del Orgullo Friki? R: El 25 de Mayo.
Ya que mencioné este día, esta celebración surge en España, debido a los múltiples ataques y rechazos de la cultura popular japonesa en esos lares y que, posteriormente, sería mal empleada en México para realizar un festejo inadecuado. La subcultura otaku fue descrita o fue el tema central de múltiples obras acerca del anime y manga, documentales e investigaciones académicas. El desarrollo de la subcultura se ve desde los años 1980 con la mentalidad social cambiante y el fomento de rasgos otakus en las escuelas japonesas, combinado con la resignación de algunos individuos a ser marginados sociales. La subcultura se convirtió en un grupo que se produjo con el boom del anime, particularmente con “Mobile Suit Gundam” y diversificado en el mercado de historietas, antes de ser etiquetado como otaku. Los diversos intereses de la subcultura otaku han dado lugar a numerosas clasificaciones sobre los otakus. En el año 2005, el
Instituto de Investigación Nomura clasificó a los otakus en doce grupos y estimó el tamaño y la repercusión en el mercado de cada uno de estos grupos. Otras instituciones los clasificaron más a fondo o se centraron en un único interés otaku. Estas publicaciones no se refieren exclusivamente al anime y manga otaku, clasificando en distintos grupos otakus de fotografía, automóviles, idol, y electrónica. El impacto económico de la cultura otaku ha sido estimado aproximadamente en dos billones de yenes.
-Y para el final…
En México, fue una revista que trató de introducir el término “AkibaKei” como parte de su mercadotecnía, sin embargo, muy poco lo usan para referirse centralmente a un aficionado al anime. Akibakei es una palabra para los fanáticos del anime especificamente de la ciudad de Akihabara, la capital del anime en Japón. Un servidor se fue a lo más sencillo y piensa que lo correcto es “Anime Fan” porque no sólo involucra una sola rama, sino todos los gustos y derivaciones de la cultura pop nipona. “Otaku” puede ser el término correcto para decir que somos fanáticos pero, como pueden leer, no podemos ir a tierras japonesas y gritar a los 4 vientos que lo somos, porque seríamos mal vistos. Por supuesto, no podemos dejar de lado y como referencia, a que vean la serie de Gainax “Otaku no Video”, 2 OVAS donde verán más del tema y que, próximamente les traeré como reseña. Un consejo: Ver mucho anime, coleccionar muchas figuras, hacer cosplay y demás cosas, no te hace más “Otaku” que el resto; simplemente disfruta tus gustos y tu afición pero sin excesos. Para concluir, esta es mi penúltima columna del año, por lo cual, la siguiente será para cerrar con broche de oro este 2015. El camino del guerrero solitario, a través de los términos correctos, continua…